La colección de herramientas de Francisco Dittborn Baeza, transita entre los siglos XIX y XX; son más de 2.000 piezas reunidas a lo largo de 30 años y representan todas aquellas acciones necesarias para construir un trabajo de carpintería.
Sin embargo, más que herramientas, lo que él ha coleccionado es más bien el ingenio que hay detrás de cada una de estas piezas y cómo el hombre ha resuelto las dificultades que presenta el desarrollo de un proyecto de carpintería.
Nos apasiona pensar en la historia de cada una de las herramientas: quién las imaginó, quién las fabricó, con qué propósito se manufacturaron, quién las usó, qué trabajos hicieron, cómo lucían cuando nuevas... imaginar, también, las manos del maestro y pensar sobre todo, en dignificar su trabajo poniendo en valor estas antiguas piezas.